CARNAVAL DE CADIZ 2019: Las Letras que hicieron grande a Antonio Martín

miércoles, 27 de junio de 2018

Las Letras que hicieron grande a Antonio Martín



VAMOS HACER A RECORDAR LAS LETRAS DE SUS INICIOS, ESAS LETRAS QUE LO CONVIRTIÓ EN LEYENDA VIVA DEL CARNAVAL GADITANO. 


A su tercer año de participación , Antonio Martín conseguiría estar en lo más alto de la clasificación en 1970 con Los tarantos‘. El niño de la calle San Vicente llegó al primer premio y lo hizo con una comparsa donde defendía a ultranza su condición de comparsista. 




Lleva el nombre de comparsa
los conjuntos gaditanos,
hay quien se lo toma a guasa
Y mal nos tiene considerados.
No me digan que no es bello
cantarle a la tierra suya,
compararle con el cielo
y exaltarla de hermosura.
Por eso todos los años
me siento extraño
si no te canto,
es igual que una promesa
que tengo hecha
nunca le falto
y aunque digan lo que digan
las malditas malas lenguas
comparsista toa mi vía
yo seré para mi tierra.
Tanto gozo con cantarle mis piropos
que el rumor de los demás me importa poco.
Gozo tanto que por muchos sinsabores,
sacrificios y quebrantos
nada me quita las ilusiones
y aunque existan derrotistas
soy comparsista de mil amores.


  




En 1972 volvió a descansar Paco Alba y Antonio Martín volvió a ocupar el primer puesto con ‘Los aventureros‘, una comparsa donde vuelve a demostrar que es uno de los autores que supondrá el futuro de la fiesta. Destacamos de esta comparsa este pasodoble en el que le canta a la Caleta a pesar de que esta playa es la novia de Paco Alba.

Yo sé que es poco galante
dirigirse con piropos
a la novia de otro amante
pero yo, no obstante,
cantarle quisiera
a esa que llaman Caleta,
novia de un poeta
que vive por ella.
Si siente celos que rabie
lo mismo que yo he rabiao…
Cuando escuchaba
como le cantaba
lindas serenatas
y ella coqueta
dichosa jugaba
en su mar de plata
mientras de envidia moría yo…moría.
Por eso este año
aprovecho que tu amante no ha venío
pa decirte lo que yo por ti he sentío
ay, mi rinconcito caletero.
Por eso te canto
todo lo que te tenía yo guardao
como un novio locamente enamorao
al que le han dao celos y celos,
celos de ver las estrellas
cuando en tu arena
su luz derraman,
celos tengo del viento
que despierta tus aguas.
Eres un tesoro
que en el mar se arrulla, preciosa Caleta,
más rubia que el oro, que el oro,
quién tuviera la gran suerte
de tenerte por novia suya
como te tiene ese poeta. 

  




En 1973 llegó uno de los momentos álgidos de la trayectoria de Antonio Martín. Tras varios años de ganar únicamente cuando Paco Alba, su maestro, descansaba, el discípulo lo superó y ‘Capricho Andaluz‘ quedó en primera posición mientras que Paco Alba quedaba segundo con sus ‘Estampas goyescas’ siendo esta última comparsa abucheada por parte del público que quería volver a escuchar a la comparsa del niño de San Vicente. 




De la comparsa de Martín de ese año podríamos destacar varias letras, entre las que destaca el célebre pasodoble de la rosa. En un principio, esa letra no tenía mayor importancia para el grupo, era un pasodoble más. Una noche en la que la comparsa cantó en su ensayo para varios aficionados, una vez terminado el repertorio, le pidieron el pasodoble de la rosa, el director (Antonio Trujillo, el Catalán) decidió cantarlo y fue el gran pelotazo de la agrupación. Hoy vamos a recordar esta agrupación también con una pieza menos recordada pero de mucha calidad, la presentación. 




Las guitarras suenan solas,
las guitarras suenan solas
y se desgarran las gargantas
se desprende el cante solo
al contemplarte reina
gitanita mora.
Bendición de Dios
que a su capricho te quiso crear
canción compuesta con los rumores del mar
del mar que de noche y día
adorándote está.
Eres tú, sentir
de Andalucía eres su pregón,
pregón de la alegría representación
del sol tú eres lo más grande de la creación.
Y por ser así
te envidia todo el mundo sin razón
y yo por día voy sintiendo más pasión
por ti, tú eres para mí mi locura 
de amor.  






Entre las flores
de un jardín bello
nació una rosa,
tan rebonita,
que hasta el agüita
que le caía,
que le caía...
se contagiaba
de su perfume
de flor hermosa,
y aquella agüita
en agua bendita,
se convertía,
se convertía...
Su jardinero
la fue mimando
igual que a un niño
y hasta cariño
le iba tomando
día tras día,
la fue cuidando
con gran esmero
y el jardinero
sin su rosita
ya no vivía.
Pero en una mañana
que muy confiada
el viento se mecía,
una mano malvada
se la encaprichaba
y la arrancaría,
y al ver su jardinero
que no estaba en su rama,
muriéndose de celos
y en su dolor,
así la lloraba.
Rosa,
ay dime dónde está rosita,
de mi jardín la más hermosa,
fragante y primorosa,
di que mano maldita
te ha arrancao la via.
Rosa,
sin ti el jardín ya no reluce,
ni brotará ese aroma dulce
que de tus petalitos
tan requetebonitos
el aire percibía.
Quien de
tu rama,
ay te arrancaba,
no sabía
y a ti sin vida
te dejaba
y de mi se llevaba
lo que en el mundo más
quería.







En 1977 continúa en Cádiz y volverá a tocar lo más alto de la clasificación, ya que vuelve a obtener el primer premio con ‘Los mandingos‘, una comparsa que luchó fuertemente contra otra agrupación histórica ‘Nuestra Andalucía’ de Pedro Romero y Aurelio del Real.

Sin yo saber por qué
me caractericé
tratando de imitar
al hombre de color.
Aquel negrito fiel,
privao de libertad,
que nació pa ser
esclavo de su señor.
Sin saber la razón
me siento como él
viendo lo que sucede
a nuestro alrededor
en esta humanidad
que ya tal como va
solo la salva Dios.
Hoy el mundo ya no es mundo,
hoy se ha vuelto todo injusto
y no se respetan
los seres humanos.
Por el maldito dinero
aún existen los negreros
y explotan al pobre
los privilegiados.
Si antes se discriminaba
al hombre de color,
hoy también se discrimina
la clase social,
el que más tiene más vale.
Yo en este mundo tan perro
y lleno de maldades
me siento negro de verdad. 






‘Ángeles y demonios‘ que mantuvo una enorme lucha carnavalesca con ‘Navegantes gaditanos’ de Pedro Romero y Aurelio del Real que se saldó con un empate técnico, es decir, que ambas fueron condecoradas con el primer premio de la modalidad. De esta comparsa destacan el pasodoble dedicado al andaluz o este donde hace alusión a su pasodoble de ‘Los mayordomos’, ya que el tanguillo no solo no se está perdiendo sino tomando fuerza.

El tanguillo gaditano
se pierde y es una pena,
esa letrilla sincera yo canté,
yo canté…
El cantecillo gitano
que nació por nuestras venas
y le juro muy de veras
que en sus tiempos lamenté.
Pero al cabo de los años
al ver que está resurgiendo,
solo queda, qué remedio, claudicar
y decir muy felizmente
qué suerte rectificar
pues ya te cantan los chiquillos,
por las plazuelas hay tanguillos.
Ya te prefieren los mayores
a otro tipo de canciones,
todos te brindan un ole,
rey del folklor.
Y otra vez cantaré
que si bajaran del Cielo
los que al tango dieron vida,
igual que dije ayer,
se morirían de nuevo
pero ahora de alegría
al oír, no es pasión,
de esta forma que cantáis
los coristas gaditanos, vive Dios,
por las calles de mi tierra
que hasta el cielo tiembla
el tanguillo de Cai.



PRESENTACIÓN COMPARSA CALETA 


Caleta, Caleta
Mar y cielo
Una vieja playa
Rocas desgastadas
Por tantas hazañas
Y en el firmamento
Hay cierto misterio
Un pueblo perdido
Duerme en sus entrañas
Y el rumor del aire
Desprende un lamento
Que desgarra el alma


Es el embrujo sobrenatural
De esa diosa del mar
Que se llama Caleta
Que adormecida en su soledad
Se va haciendo inmortal
Sin que nadie lo sepa


Su viejo faro relevo del sol
Que en la noche es timón
Para los marineros


Viva la suerte de poder gritar
Contemplando su mar
¡Yo nací caletero!


Nace un nuevo día
De nuevo amanece
El mar se retira y descubre certero
Rocas que abastecen
Su mar adivino
Buscando la vida van los caleteros


Mariscan y pescan
Y otros se contentan
Con mirar su cielo


Es el embrujo sobre natura
De esa diosa del mar
Que se llama Caleta
Que adormecida en su soledad
Se va haciendo inmortal
Sin que nadie lo sepa


Su viejo faro relevo del sol
Que en la noche es timón
Para los marineros


Viva la suerte de poder gritar
Contemplando su mar
Yo nací caletero


Viva la suerte de poder gritar
Contemplando su mar…
Caleta
Caleta
Caleta
Caleta










En 1983 volvió a ser protagonista de otra batalla de coplas histórica. En ese año quedó en cuarto lugar ‘Los comuneros’ de Enrique Villegas, en tercer lugar ‘Los jinetes de la Pampa’ de Manolo Varo de Barbate. La disputa vino entre el primero y el segundo, una comparsa clásica y otra vanguardista, una de Antonio Martín y otra de Quiñones-Aurelio. ‘Robots’ era la sucesora de ‘Dioses del Olimpo’, dirigida por Pepe el Caja y con componentes históricos como Catalino o Caracol, y era una comparsa de corte moderno para la época y toque futurista. ‘Agua clara‘, en cambio, era la comparsa más pura y más tradicional. Estuvo muy igualada la balanza, aunque finalmente se inclinó a favor del clasicismo de la comparsa de Martín y ‘Agua clara’ se alzó con el primer premio.

Me viene a la mente
como si lo viera,
como si lo viera,
Calle San Vicente,
donde yo naciera,
donde yo naciera.
Plaza la Cruz Verde,
corazón del barrio,
corazón del barrio,
canastillo a cuesta
pasaba a diario,
pasaba a diario.
Y allí estaba yo
entre el corrillo de los niños
mientras tú me contemplabas,
mare, ay mare.
Y triste de mí,
que nunca supe del cariño
que encerraba tu mirada,
de esos suspiros del alma,
de esos besos que me dabas.
El día que el destino me apartó
de tu regazo me sentí solo
y a pesar que otra mujer me da su amor,
cuántas noches recordándote te lloro.
Por eso hoy vuelvo a ese mismo rincón
con mi infancia perdía.
Ay, calle San Vicente,
placita la Cruz Verde
regrésame a esos días
pa devolverle con el corazón
ese beso de amor a la mare mía. 


  




















No hay comentarios:

Publicar un comentario